viernes, 24 de julio de 2015

El festejo que no fue

Los peones de los campos de la Patagonia argentina se habían alzado en huelga , contra los salarios cortísimos y las jornadas larguísimas , y el ejército se ocupó de restablecer el orden.
Fusilar cansa. En esta noche del 17 de Febrero de 1922, los solados , exhaustos de tanto matar, fueron al prostíbulo del puerto San Julián, a recibir su merecida recompensa.
Pero las cinco mujeres  que allí trabajaban les cerraron la puerta en las narices y los corrieron al grito de asesinos, asesinos , fuera de aquí....
Osvaldo Bayer ha guardado sus nombres. Ellas se llamaban Consuelo García. Ángela Fortunato, Amalia Rodriguez, María Juliache y Maud Foster.
Las putas . Las dignas.





Mujere
Eduardo Galeano
Siglo XXI España
foto : Cartier Bresson