
Si , los muertos están en todas partes . No se los puede eludir tan fácilmente . En cada uno de los rincones de nuestras vidas secretas sentimos la triste y ciega presión de sus dedos despojados pidiendo que se les conceda un recuerdo, que se los haga renacer a la vida , invadir nuestros abrazos. LLevamos dentro de nosotros, como trofeos biológicos , la herencia de sus fracasos vitales; la forma de unos ojos , la curva de una nariz, o en líneas más fugitivas aún como la muerta risa de alguien, o un hoyuelo que despierta una sonrisa tiempo ha enterrada. El más simple de aquellos besos nuestros poseía un linaje de muerte. En ellos se amparaban amores olvidados , ansiosos por renacer . Las raíces de todos los suspiros están enterradas en el suelo...
Lawrence Durrell
Clea
Pocket Edhasa
Foto: Abused Silence Alexander Knupletz
Un fragmento tan bello como intenso...Buena lectura la de Clea.
ResponderEliminarbeso