
Más sorprendente aún es que has tenido una infancia. Mira a un niño de siete años que juega con sus soldaditos en la alfombra del salón. Te pido que lo mires con atención. Desde el divorcio, ya no tiene padre. Ve bastante poco a su madre, que ocupa un puesto importante en una firma de cosméticos. Sin embargo juega a los soldaditos , y parece que se toma esas representaciones del mundo y de la guerra con vivo interés. Ya le falta un poco de afecto, no hay duda , pero cuánto parece interesarle el mundo!
Michel Houellebecq
Ampliación del campo de batallaAnagrama
Foto : Joseph Szabo
...PRECIOSO TEXTO, AMIGO! CUANTA AGRIDULCE TERNURA EN ESAS PALABRAS TAN INEVITABLEMENTE REALES EN MUCHAS VIDAS. Y EN ESTA NOCHE SERENA, A TRAVES DE ESAS PALABRAS, PUEDO AGRADECER ( Y LO HAGO! ) A LA VIDA, PORQUE, PESE A TODO... HE ACARICIADO Y LO SIGO HACIENDO... LA FELICIDAD!!! :-)
ResponderEliminarHouellebecq nos ha dado grandes lecturas la verdad.
ResponderEliminarQue bien que nos visita nuestro amigo Arquero.
Besos a los dos