Debo reconocerlo : no hizo falta emprender aquel largo viaje que me
trajo a Barcelona , soportar las mil vicisitudes de la aventura (no siempre
dichosas) o ese cuarto a oscuras de la calle Valencia , frente a los monstruos
empecinados de la Sagrada familia . La Habana siempre estuvo lejos . ¿O será
mejor corregir la expresión y decir que fui yo quien siempre permaneció lejos de
la Habana , que mi ciudad no era mi ciudad? Aunque es probable que tampoco sea
justo , y pueda replantearlo de otro modo : ¿y si ,después de todo, era yo el
habitante de una ciudad en la que no me hallaba?
Abilio Estevez
Inventario secreto de la Habana
Fabula Tusquets
No hay comentarios:
Publicar un comentario