Sueños que viajan en pompas de jabón

"Me das lástima y risa ,pobre Alexis! Eres un muchacho flaco, espigado, de ingrato color, Alexis. Tienes unos ojos profundos que miran con una confianza un tanto insolente. Estás muy seguro de ti mismo! Tienes fe. Te sientes lleno de fuerza, capaz de cualquier empresa. Y todo porque has pasado algunas crujías de hambre, porque hiciste un viaje y has terminado unos estudios . Ya sé que no ha sido fácil. Sé que es amargo no poder contemplar el cielo azul, ni ver esponjarse las flores . Pero te engañas si por eso crees que has sufrido y que puedes mirar con cierta seguridad el porvenir , Alexis. Ahí estás , muchacho, trémulo de ansiedades , asomado apenas al umbral de la vida. Te crees con derecho a algo que no sabes en qué consiste, pero que ya reivindicas : la felicidad. La sangre te canta en las venas con un gozo primaveral de inefables presentimientos . Tienes las pupilas encendidas de ansiedad y el mundo se te ha hecho tan pequeño que apenas puede contener la huella de tu pie. No te voy a preguntar el motivo de todo esto, Alexis , no te lo voy a preguntar. Aspiras a un vida mejor y te crees capaz de alcanzarla , pero de ese " mejor " apenas si tienes conciencia . Sólo sabes que es algo distinto, ¿Mejor? Yo podría decirte , Alexis, que no va a ser mejor. Pero es bueno soñar, y yo , ahora quiero dejarme acunar por tus ensueños y olvidarme un poco de mi mismo. Llévame de la mano, muchacho ; tienes en ella el amuleto de la felicidad y lo estás ignorando. Sueña , Alexis : soñemos . Vamos a despertar muy pronto - juntos - de bruces sobre el dolor .



Cuando voy a morir
R. Fernandez de la Reguera
Circulo de lectores
Foto : Gerda taro